Aumenta el transporte y refuerzan controles en estaciones para evitar evasiones.

Desde el 1 de octubre, con el aumento del boleto a $757, las autoridades han reforzado la presencia de personal de seguridad en subtes y trenes para frenar la evasión del pago.

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A partir del 1 de octubre, los usuarios del transporte público enfrentarán un nuevo aumento en las tarifas, con el boleto de subte alcanzando los $757. Ante esta situación, las autoridades han incrementado la presencia de personal de seguridad en estaciones de subte y tren para evitar que los pasajeros evadan el pago, una práctica cada vez más común en los últimos meses. La medida busca reforzar el control y garantizar el cobro de las nuevas tarifas.

 

Desde agosto, se han visto más policías, guardias de prevención y personal de seguridad, en estaciones clave como Retiro y Constitución. Sin embargo, en las últimas semanas, esta presencia se ha expandido a otras estaciones con el objetivo de frenar la evasión del pago del pasaje. Estos agentes, aunque vigilan y advierten a los usuarios, no están facultados para multar; solo los inspectores en los trenes pueden aplicar sanciones, que ascienden a $2800 para quienes no abonen el boleto.

 

El aumento en las tarifas y la implementación de mayores controles ha generado malestar en muchos usuarios, quienes ven en estos refuerzos de seguridad una señal de la creciente tensión entre la necesidad de cumplir con las normativas y el impacto económico que representan los constantes aumentos del transporte público.

 

Por Lourdes Cuervo en el marco de las prácticas profesionales de la Carrera de Comunicación de la UBA.

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